Era evidente y hasta escandaloso el actuar mafioso, a quién ya la denominan “alias Fiscal de la Nación” (FN), Patricia Benavides. Que esperamos, el miércoles 6 de diciembre sea expectorada del cargo al que se aferra pese a la demanda de su renuncia, por escrito, de un gran sector de fiscales. Ojalá que la gente, no nos contentemos con una cantada destitución. Debemos hacer fuerza porque se adelante las elecciones para reemplazar a este congreso desvergonzado y a una presidenta detestada por el 90% del pueblo. Este régimen en su empeño por apoderarse de las instituciones claves para salvar sus pellejos y no soltar el poder, ¿hasta dónde pensaba tensar la pita? Menos mal, esta se rompió de tanto estirarla. Para suerte de los peruanos pasivos, los caviares, o lo que llaman caviar los corruptos, expusieron cómo se sigue manejando la justicia en el país.

Por Yonel Rosales

El mismo sector que vendía la justicia a su antojo en el 2018, caso probado con los audios de la corrupción, ese mismo grupo político sigue en la lucha por volver a controlar el sistema judicial. No por gusto las películas repiten cansinamente la lucha entre el bien y el mal. Así como cuando un grupo de fiscales honestos expusieron la hedionda madriguera en las altas cortes, ahora una fiscal, Marita Barreto, a quien no le importa el color político ni cree que le debe el favor por su designación, puso al descubierto cómo la FN es un gran engranaje de la máquina del mal que se apodera de las instituciones fundamentales para seguir en lo mismo.

No se trata de izquierdas o derechas, de caviares o conservadores. Se trata de personas que anteponen el bien común, el interés de todos. Ese papel cumplió tanto la fiscal Marita Barreto como el coronel Harvey Colchado cuando con dedicación investigaban al entorno corrupto del expresidente Pedro Castillo, y los seguidores de este, los descalificaron. Ahora último, cuando fueron por la presunta organización criminal de la FN, el bando de la derecha salió igualmente a insultarlos, o lo que ellos creen que es insultar, llamándolos caviares. Cuando los planes ilícitos de la mafia política fracasan o les critican por sus intenciones o no se suman a ellos o simplemente no se callan, la culpa es de los caviares. Queda claro que los caviares son personas que ponen por encima de los intereses particulares el beneficio común. Caviares = personas que se enfrentan a la corrupción.   

Pero en esta lucha entre el bien y el mal, en estos momentos, la ventaja lo lleva el frente de los corruptos, los chuecos y mafiosos. Si no hay movilización, si la gente prefiere quedarse en silencio, la victoria está asegurada para los fujicerronistas, los Acuñas, los Lunas, los puercos (Porky), los del magisterio y su banda. Es probable que el 6 de diciembre, nos entreguen la cabeza de la fiscal Benavides, luego se acomodarán y continuarán en su trama de tomarlo todo. Pero qué surrealista resulta el juego del poder, justo la víspera del fracasado golpe de Castillo, se decidirá la suerte de quien utilizó al expresidente como su principal bandera de fama.